La frenología fue desarrollada por un médico Alemán que se llamaba Franz Joseph Gall (1758-1828), este buen hombre, sostenía en su teoría que se podía adivinar el carácter y las predisposiciones de una persona por las protuberancias de su cráneo.
El nombre proviene del griego: φρήν, fren, “mente”; y λόγος, logos, “conocimiento, esta ciencia difiere entre la cronometría que se encarga del estudio del peso, tamaño y forma del cráneo y en la fisiognomía que es el estudio de los rasgos faciales.
La base de la teoría era que las facultades de una persona (afectivas e intelectuales), que eran 27, residían en un lugar concreto del cerebro y claro en función de la forma podías saber que partes estaban más desarrolladas y por consiguiente poder predecir el comportamiento de esa persona.
Como es lógico hoy en día está catalogada como pseudociencia, pero no obstante Franz Joseph Gall, no era solo un loco, sino que se le considera uno de los anatomistas más importantes del cerebro, siendo el pionero en la investigación cerebral además de fundar la psicología como ciencia.
Esto demuestra que puedes ser un gran experto en unos temas pero equivocarte radicalmente en otros.
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